Las carillas son finas láminas de porcelana o resina que se adhieren al exterior de los dientes, mejorando su apariencia estética. Su objetivo no es mejorar la funcionalidad de los dientes, sino proporcionar una apariencia más armoniosa en términos de tamaño y color.
Cada diseño de sonrisa se personaliza para adaptarse a la sonrisa única de cada paciente, asegurando que el resultado parezca lo más natural posible al colocarse junto al resto de los dientes.
Existen dos tipos de carillas: de porcelana y de resina. Las carillas de porcelana ofrecen la más alta calidad, durabilidad y apariencia natural. Pueden mantenerse en perfectas condiciones durante hasta 15 años sin perder su color. Las carillas de resina tienen una vida útil máxima de aproximadamente cinco años y requieren mantenimiento regular para evitar manchas y preservar su brillo.